Kingsman no pretende ser solo una marca de ropa, sino que lucha por convertirse en un estilo de vida. Nace de la ilusión y las ganas de tres amigos, unidos por dos aficiones: la ropa y el diseño. Un proyecto novedoso que va a cumplir su primer año de vida.

Persiguen una línea enfocada al hombre, inspirándose en el estilo inglés; de ahí el nombre y su distintivo: el bombín. Pueden presumir de ser una marca pensada, diseñada y elaborada 100% en España. Se dirigen al público más jóven, por ello sus diseños se centran en una estética clásica pero actual. Un toque de aire fresco. Y quien mejor que Befresh para reflejar esa filosofía en el desarrollo de su nueva página web.

Un placer para nosotros haber podido formar parte de un proyecto como este: Jóven, arriesgado y divertido. Nuestra colaboración se ha materializado en un canal de ventas online, funcional y atractivo. Un escaparate visual en donde mostrar y adquirir sus nuevas creaciones. Mucha suerte compañeros.